EL CUENTO DE ELENA

Hubo una vez en un país, un grupo de “intelectuales” quienes entre porros de hojas verdes, descubrieron que no todo marchaba como debiera. Que en este país ya no solo se trataba de Ricos o Pobres.

Ahora, había Ricos, Pobres, Intelectuales, y los que Trabajan.

Que además los gobernaba un Simio, que no era, Ni Rico, Ni Pobre, Ni intelectual, Ni de los que Trabajan.

Así que, con la idea de poner las cosas como debieran, alzaron la voz, juntaron un grupo de rebeldes, al cual llamaremos “estudiantes” y entre mitos y verdades, hicieron lo que nadie mas haría, se proclamaron por la verdad y por lo que querían, se unieron en marchas, y CASI convencían al resto de ricos, pobres, intelectuales y los que trabajan.

Dentro de los primeros “intelectuales” Había una mujer, que se llamaba Elena y que se limitaba a observar, ¡ah!... olvide decir, que en este país, “intelectuales” es solo para el genero masculino, para el resto se les dice… loca... o zorra. Que suerte la mía, que abunden en mi familia locas y zorras.


Regresando con Elena, resulta que ella no tan idealista si no más bien realista, se atrevió a opinar que aquello necesitaba más orden y menos humo. Empezó a sonar “más loca” y a ser menos escuchada.

Inconscientes, “intelectuales” entregaron a “estudiantes” por buenos ideales, no se discute, pero sin medir hasta donde es capaz el ser humano deactuar cuando desea poder.

El Simio y sus Gorilas, convirtieron los sueños de estos en ríos de sangre y en delito hablar de ello.

Con un arranque de rabia y dolor. Elena alzo mas alto la voz señalando culpables
de irresponsabilidad a “intelectuales”… quienes ahora eran héroes y leyendas vivas, eso si ¡! … ellos no fueron a nadar a la plaza de las tres culturas ese día.

Adiós, Elena declarada loca, talvez por miedo.

Vivió lejos, murió sola. Pero nunca arrepentida

Una de las dos Elenas de Octavio Paz. Elena Garro.

A: Yadira Alvizo
Enero 2009